Estos días que pasan, los de final de curso, me llevan siempre a reflexionar, sobre lo fácil, lo difícil, sobre la orientación, sobre la motivación…¿Que «coño» pasa que los alumnos no quieren las ciencias?.
Pongo mi primera, o mi segunda piedra. Por si alguien no quiere ir al Laboratorio, o si. Por si alguien quiere usar las nuevas tecnologías como vía de motivación a aquello de ¿por qué son las cosas así?.
El CPR de Badajoz decidió organizar un curso sobre FQ y TICs. Necesitaban a alguien para hablar sobre el tema. Sus intereses y los míos se cruzaron y durante el mes de octubre se han realizado una serie de ponencias (o charlas entre amigos) donde yo he tenido la suerte de poder presentar a varios profesores una serie de ideas relacionadas con la Física y Química y las nuevas (o ya no tan nuevas) tecnologías de la información y la comunicación.
Lo primero, y no por ello sencillo, era reflexionar sobre la metodología «tradicional» para nuestras clases frente a otras formas más activas y (espero) más motivadoras para los alumnos/as. «Ya viene éste a convencernos de que usemos los ordenadores». Algunas caras expresaban este pensamiento y pese a que no se dijo en voz alta creo que en aquellos primeros instantes la idea estuvo presente. Luego se disipó.
Todo comenzó a rodar. Creamos cuentas de correo. Guardamos nuestros favoritos en delicious (se sorprendieron de lo generosa que es la gente compartiendo). Aprendimos a recibir información vía RSS (comencé a ver aquello de 1000 elementos no leídos), y entraron en lo «online» con las sencillas y potentes herramientas Google (Docs, Calendar, y obviamente Reader). Alguna presentación fue subida a Slideshare, otras se crearon online con utilidades web 2.0 como 280 slides.
Llegó el momento de los blogs, y sin preliminares crearon los suyos, a los que les deseo larga existencia. Luego las wikis, donde muchos vieron una potente herramienta de trabajo en grupo (no podía ser de otro modo). Después algo de Joomla y Moodle, para avanzados.
Y de postre, no podía ser de otro modo, las Redes Sociales. Creamos una red Ning de Docentes de FQ, con deseos de permanencia posterior al curso, y nos asomamos a Facebook y Twitter en un afán de demostrar como falso, el tópico de «maldad» de este tipo de herramientas.
Muy buena acogida por parte de los profesores-alumnos de estos recursos, y mucha la satisfacción del que suscribe estas líneas al ver algo de luz en los ojos de los cansados compañeros que tras una mañana de «batalla educativa» tenían tesón y voluntad de mejorar, por las tardes, siempre para beneficio de sus alumnos/as.
No suele equivocarse Silvio cuando canta: «…He preferido hablar de cosas imposibles, ya que de lo posible se sabe demasiado…», espero se equivoque esta vez.
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